Saturday, December 22, 2007

Tu ausencia

Ahora no estás y te echo de menos. He visto tu osito preferido en tu cama y rápidamente he pensado en tí. En tu manera de cogerlo, abrazarlo y como le haces besos cuando le decimos que debe quedarse para vigilar tu cama. Tu osito es un vínculo indestructible desde el primer día que te vimos y estas sensaciones siempre estaran presentes que, algun día, con toda la ternura del mundo te explicaremos al oído.

Monday, October 01, 2007

La dureza existe

Muchas veces necesitas ver imágenes que te recuerden tu trayecto. La distancia sirve porque a menudo recuerdes siempre las cosas buenas del viaje pero sabes que debe malas y que no terminan con el sueño que muchos habían imaginado. Por este motivo los finales infelices te obligan a valorar lo que tienes y desear que ojala todo el mundo pudiera cerrar su proceso vital con cara de felicidad y orgulloso de uno de los momentos más mágicos de la vida: el hecho de ser padres.

Monday, August 20, 2007

Aromas impactantes

En ocasiones tienes ganas de reencontrarte con los recuerdos. Son tan profundos que te acompañan porque, de hecho, cada día tienes una prueba. Un día, haciendo una pausa, puedes abrir un libro de tu trayecto y quedarte pensativo durante bastante rato. Otro día, de casualidad, puedes abrir una guía de viajes del país dónde fuiste y encontrarte todavía con un trozo de papel perfumado. Es curioso que tras un año todavía quede el olor del perfume entre las páginas. Esto ya te invade y te descoloca. La casualidad es tan grande que te obliga a oler con todas tus fuerzas por recordar el aroma y a pensar como y cuando llegó allí. Las vivencias pueden ser casi a cada paso si realmente las llevas todavía dentro de ti.

Wednesday, June 06, 2007

Momentos mágicos


Hay momentos especiales, mágicos, tiernos... momentos llenos de recuerdos que te pueden llegar a salvar un día. Para encontrarlos sólo has de estar predispuesto a intuir que con una simple mirada, un gesto o un detalle todo puede ser más especial. Hay niños que tienen una magia llena de sensaciones y que lo ofrecen a cambio de nada. Tienen el don de dar sin esperar nada y su ternura te cautiva. Estirarías los brazos para abrazarlos y apretar fuerte, intentando parar el tiempo, para disfrutar de unos momentos que tú sabes que son especiales y, ellos, con su ingenuidad desconocen todavía. Por lo tanto, ellos dan y dan y tú, si vas a pecho descubierto, sólo has de estar preparado para saberlos apreciar. Y después es cuando ves que son instantes fascinantes.